Uñas Encarnadas
Una uña encarnada se produce cuando la piel alrededor del borde del dedo gordo del pie de su hijo se enrojece, se hincha y se vuelve sensible. Esto suele ocurrir cuando la uña, especialmente la del dedo gordo, crece dentro de la piel circundante. Incluso puede provocar una infección si no se detecta a tiempo.
Para ayudar a prevenir las uñas encarnadas, asegúrese de que su hijo use zapatos que le queden bien y que no sean demasiado ajustados, como botas de vaquero. Esto se debe a que los zapatos demasiado ajustados o demasiado cortos pueden apretar los dedos y empujar la uña hacia la piel.
Al cortar las uñas de los pies de su hijo, siempre córtelas en línea recta y evite cortarlas demasiado cortas o redondear los bordes. De lo contrario, la piel de los lados puede cubrir las esquinas de la uña, lo que hará que la uña crezca dentro de la piel.
Para el tratamiento en casa, sumerja el pie afectado dos veces al día en agua tibia mezclada con jabón antibacteriano o sales de Epsom. Masajee suavemente el área hinchada lejos de la uña mientras la remoja. También puedes colocar suavemente un pequeño trozo de algodón debajo de la esquina de la uña para evitar que se clave en la piel.
Si hay hinchazón o supuración, aplica un ungüento antibiótico como Neosporin 2 o 3 veces al día. Si la cutícula solo está irritada pero no hinchada, es posible que no necesites el ungüento.
Anima a tu hijo a usar sandalias para evitar la presión en el dedo del pie mientras se cura. Los recién nacidos suelen tener uñas encarnadas, y masajear sus deditos a diario y cortar las uñas en línea recta puede ayudar.
En algunos casos, si la uña del pie sigue encarnándose o se infecta gravemente, nuestro médico puede tener que cortar o quitar parte de la uña. Pero no te preocupes: se asegurarán de que tu hijo esté cómodo durante el procedimiento.
Llámanos de inmediato si tu hijo presenta fiebre de más de 101 °F, tiene escalofríos o si una raya roja se extiende más allá del dedo del pie. También puede ponerse en contacto con nosotros si nota pus o secreción amarilla, si los síntomas no mejoran o si no mejoran en dos semanas.