Piojos
Los piojos son pequeños insectos sin alas que viven en el cabello humano y se alimentan de la sangre del cuero cabelludo. Son comunes en los niños y se propagan fácilmente a través del contacto cercano.
Los piojos pueden provocar picazón en el cuero cabelludo de su hijo, y el rascado constante puede provocar irritación o incluso infección. Si su hijo termina teniendo piojos, trate de no preocuparse. No son un peligro para la salud y no indican una mala higiene. Los niños con frecuencia contraen piojos porque juegan cerca unos de otros y suelen compartir artículos personales como sombreros, cepillos y almohadas.
Para detectar piojos, revise cuidadosamente el cabello y el cuero cabelludo de su hijo. Los piojos son pequeños insectos de color canela grisáceo que puede ver en el cuero cabelludo o en los tallos del cabello. Sus huevos, o liendres, parecen pequeñas motas blancas firmemente adheridas al cabello, generalmente cerca del cuero cabelludo, a menudo alrededor del cuello y detrás de las orejas.
Parecen pequeños puntos y pueden parecerse a la caspa. Pero a diferencia de esta, no se desprenden fácilmente. Mojar el cabello y usar un peine de dientes finos junto con un poco de acondicionador puede ayudarlo a encontrar piojos o liendres más fácilmente.
Si encuentra piojos o liendres, no se asuste. Es manejable y no es una emergencia. Los tratamientos de venta libre como Nix Cream Rinse u otros champús y lociones especiales son efectivos. Siga las instrucciones del paquete cuidadosamente y repita el tratamiento solo cada 7 a 9 días si es necesario.
Para niños muy pequeños o si prefiere un enfoque sin productos químicos, puede eliminar los piojos a mano. Peine el cabello mojado de su hijo cada pocos días hasta que esté seguro de que no quedan más piojos o liendres. Eliminar las liendres es crucial porque los tratamientos pueden no matar todos los huevos.
Si los piojos siguen allí después del tratamiento, puede deberse a que han desarrollado resistencia al medicamento, así que hable con su médico si es necesario.
Para prevenir la propagación de piojos, evite compartir artículos personales y lave la ropa, las toallas y la ropa de cama con agua caliente. Aspire las alfombras y los tapizados que puedan haber estado en contacto con piojos. Anime a su hijo a evitar el contacto de cabeza con cabeza y a no compartir elementos como peines o sombreros. Si nota que su hijo se rasca la cabeza, vuelva a comprobar si tiene piojos y liendres.
Si los tratamientos de venta libre no funcionan, aplicar Cetaphil Gentle Skin Cleanser todas las noches durante dos semanas puede ser una alternativa. Si tiene alguna inquietud o problema persistente, contáctenos para obtener asesoramiento.