Lactancia Materna
La lactancia materna es el mejor comienzo para tu pequeño, ya que le proporciona la nutrición perfecta para favorecer su crecimiento y desarrollo. Al comenzar este proceso, tendrás muchas preguntas como madre primeriza, y eso es completamente normal. Repasemos algunas de las inquietudes más comunes para que tú y tu bebé puedan tener una experiencia de lactancia materna satisfactoria y sin problemas.
¿Cuándo Debo Comenzar a Amamantar?
Lo ideal es que comiences a amamantar lo antes posible después del nacimiento. Los recién nacidos suelen estar alerta y listos para mamar en las primeras 1 o 2 horas. Durante estos primeros días, tus senos producen calostro, un líquido espeso y rico en proteínas que es perfecto para las necesidades de tu bebé. Está repleto de anticuerpos que ayudan a proteger a tu bebé de afecciones como diabetes, obesidad, asma, infecciones de oído e incluso el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).
Después de 3 a 5 días de lactancia materna, el calostro se convertirá en leche madura. Es completamente normal que tu bebé pierda un poco de peso durante este tiempo. La recuperarán una vez que se haya establecido por completo el suministro de leche.
¿Cómo Coloco a Mi Bebé Para Amamantar?
La comodidad es clave. Sostenga a su bebé con el cuerpo completamente girado hacia usted, panza con panza. Su antebrazo debe estar alrededor de su cintura y su cabeza apoyada en el pliegue de su codo. Use su mano libre para sostener su pecho, colocando el pulgar por encima y los dedos por debajo de la areola, sin cubrirla. Cosquillee suavemente sus labios con su pezón para alentarlo a prenderse, asegurándose de que su boca cubra la mayor parte de la areola.
Si ha tenido un parto por cesárea o si su bebé es pequeño, la posición de pelota de fútbol o de embrague puede ser más cómoda. Alternativamente, puede intentar acostarse de lado, que suele ser muy cómoda para las tomas nocturnas. En esta posición, recuéstese de lado con su bebé frente a usted, panza con panza.
¿Con Qué Frecuencia Debo Amamantar?
En los primeros días, intente realizar de 10 a 12 tomas en 24 horas. Amamantar con frecuencia ayuda a establecer el suministro de leche y minimiza la congestión mamaria. Sabrá que su bebé se está alimentando bien cuando no sienta dolor, escuche que traga y su nariz y barbilla toquen su pecho. Si se queda dormido mientras amamanta, no se preocupe: es normal.
¿Durante Cuánto Tiempo Debo Amamantar?
Los expertos en salud recomiendan la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses de vida de su bebé. Después de los 6 meses, puede comenzar a introducir alimentos sólidos mientras continúa amamantando. La situación de cada familia es diferente, así que haga lo que funcione mejor para usted y su bebé.
¿Qué Puedo Hacer Si Tengo Los Pezones Doloridos?
La posición adecuada generalmente previene los pezones doloridos, así que asegúrese de que su bebé esté bien prendido. Si sus pezones se duelen, intente cambiar de posición para aliviar la presión. Si se agrietan, déjelos secar al aire después de amamantar y extraiga un poco de leche materna para aplicar en el área, lo que puede ayudar a la curación.
Evite el jabón en los pezones y no use protectores de pezones, ya que pueden interferir con el flujo de leche.
¿Cómo Puedo Controlar la Congestión Mamaria?
La congestión mamaria suele aparecer cuando te baja la leche por primera vez, normalmente entre 2 y 5 días después del parto. Puedes sentir los senos llenos y firmes, lo que a veces dificulta que tu bebé se prenda.
Para aliviar esto, aplica compresas tibias o toma una ducha tibia antes de amamantar y masajea suavemente tus senos. Extrae un poco de leche con la mano o con un extractor hasta que la areola se ablande y luego anima a tu bebé a que se prenda. Después de amamantar, las compresas frías pueden ayudar a reducir la hinchazón.
¿Mi Bebé Está Recibiendo Suficiente Leche?
En las primeras semanas, tu bebé debería mamar de 8 a 12 veces en 24 horas y debería mojar al menos 6 pañales al día. También debería parecer satisfecho después de alimentarse.
Recuerda que los bebés amamantados pueden querer mamar con frecuencia, especialmente durante los períodos de crecimiento acelerado; esto es normal y ayuda a aumentar tu producción de leche. Evita darle fórmula o agua a menos que tu pediatra lo recomiende.
Si tienes problemas o estos consejos no parecen ayudar, no dudes en comunicarte con nuestro consultorio. Estamos aquí para apoyarla en cada paso de su camino hacia la lactancia materna.